¿Qué más felicidad puede otorgársele al hombre, que disfrutar del deleite con libertad, para poder proclamarse Señor de todas las obras de la Naturaleza, y dominar así, en la tierra como en lo más alto del cielo, alimentándose de flores y hierbas de propiedades gloriosas, y tomando cualquier cosa que le agrade a la mirada?

Quien no quedara satisfecho con semejante felicidad, merece la miseria

Edmun Espenser